sábado, 3 de diciembre de 2016

Goteo lírico en una tarde lluviosa

No sé qué emana de la sonrisa que tengo ante mí. Desprendes lumbre de tus ojos y calidez de tu boca en esta húmeda tarde otoñal;y todos tus sentidos quedan subyugados a tu ebúrnea mirada. Me arrastraría sin titubeos hasta ahogarme en el baile que tus dientes y tu lengua marcan cuando tu boca insufla tus fragrantes palabras. Y yo me hallo extasiado ante ti,hermosa desconocida,impregnándome del misterio de tu seductora mirada agazapada,cual escote,entre tus lacios cabellos. Si me dieras,beldad mía,un trozo de tu sonrisa,entonaría mi corazón la mayor polifonía que jamás el más inspirado de los ángeles habría salmodiado en el excelso éter donde adormecen las conciencias consumidas por la fragosa vida